El pasado mes de febrero nuestros estudios participaron en la realización del editorial de moda de la revista Marie Claire con la marca de lujo francesa Louis Vuitton. La producción, que contó con Ana Marti como fotógrafa y Ustyna Drul delante de la cámara, utilizó nuestra furgoneta camper Ford Transit, operada por nuestro asistente Mario Álvarez, como camerino móvil en la estación de contenedores de Renfe en Abroñigal, en la zona de Méndez Álvaro.
Marti tuvo a Gabo Boza como asistente fotografía para este trabajo para la edición española la publicación de moda. El ‘grooming’ corrió a cargo de Pedro Cedeño, mientras que el estilismo fue obra de Beatriz Valdivia. Fue una producción de Chus Casarrubios y la modelo pertenece a la agencia Trend Models.
La Ford Transit 2.0 TDCi camperizada es un vehículo ágil diseñado para el transporte de grandes equipos que se mueve con un fiable y eficiente motor diésel de 130cv que se ajusta a la normativa Euro 6 de emisiones y por tanto dispone del distintivo verde de la DGT, convirtiéndola en una alternativa polivalente que permite tanto trabajar en zonas de la ciudad restringidas por permisos o reservas como para acceder a localizaciones más exigentes en entornos más aventureros. Además, aloja 13 metros cúbicos de carga y puede transportar hasta 3,49 m. de longitud en el suelo, es posible contar con un camerino móvil de 2.00m. de altura con silla, espejo iluminado, plancha, tabla de planchar, barra para vestuario y un generador eléctrico EU 20 de 1800w (consultar para más potencia).
Comments Off on Lucía Hidalgo, ex directora de moda para Cosmopolitan, vuelve a Daylight Studios: “Aquí, en estos estudios, he bailado y cantado, me lo he pasado genial trabajando”
Más de 35 años de trayectoria profesional nos han permitido trabajar y conocer a cientos de personas que, de una u otra manera, han estado vinculados con nuestro sector: fotógrafos, estilistas, directores de arte, modelos, asistentes… Con el paso de los años, después de muchas producciones e incontables horas de trabajo, el vínculo que hemos establecido con muchos de ellos ha superado el ámbito profesional y se ha creado una verdadera relación de amistad entre nosotros. Es el caso de Lucía Hidalgo, ex directora de moda para la icónica publicación de moda Cosmopolitan, con quien compartimos muchos buenos momentos durante cerca de dos décadas. Para recordar divertidas anécdotas o para hablar del inicio de nuestra andadura juntos y charlar sobre su larga experiencia al frente de innumerables producciones, hoy nos sentamos con ella en nuestro Estudio 3 para llevar a cabo esta entrevista.
¿Recuerdas cuándo y cómo empezó tu vínculo con Daylight Studios?
Claro. Mi relación con Daylight Stuidios comienza en los primeros noventa, en 1992 o 1993, cuando empecé a trabajar en Cosmopolitan. Yo había trabajado previamente en Dunia, pero cuando conocí a Freddy (Freddy Frisuelos es el fundador y director general de Daylight Studios) ya llevaba toda la gestión de moda en Cosmopolitan y era la responsable de contratar tanto estudios como fotógrafos, etc. Estamos hablando de otros tiempos.
Y de otro sitio…
Sí, yo conocí el primer Daylight Studios en la calle Embajadores. Era otro sitio y eran otros tiempos, en el sentido de las producciones eran precarias, se hacían con muchas carencias. Ahora tiene su gracia al mirar atrás, te ríes, pero es que entonces a los dueños de las revistas les costaba entender que hubiera que pagar por una serie de cosas, porque el mundo editorial era completamente diferente al de la publicidad. Por ejemplo, lo de contratar un estudio y tener que pagarlo “bueno, vale”, pero lo justo y necesario. No se pagaba por peluquería y maquillaje, y muchas cosas se hacían con crédito, con grandes peluquerías españolas como el Grupo Llongueras, por ejemplo. Los fotógrafos sí que cobraban, Así, el presupuesto nunca llegaba. Imagínate, con las producciones sabes cuándo empiezas pero no sabes cuándo terminas. Normalmente solía ser una media de ocho o diez horas para hacer un editorial de seis u ocho fotos. Entonces, claro, nos daba la hora de comer y no había presupuesto para comida, todo un cuadro. Luego, poco a poco, afortunadamente todo eso fue cambiando. Yo creo, aunque sea una opinión personal, que en su día hice una labor más o menos buena para que se avanzara con estas cosas, en parte, claro, porque yo era parte interesada.
Tuvisteis que hacer entender que las producciones tenían que ser algo más serio.
Sí, que se tenían que abordar de una manera más profesional y que tienes que tratar a la gente como profesionales y cuidarles. Cuando vas a pedirle a la gente que rinda al máximo y que den de sí todo lo que puedan pues, hombre, lo mínimo es que coman decentemente, ¿no? Que la modelo vaya bien sentada en una furgoneta en la que no se tenga que agachar… Recuerdo que nosotros íbamos en una de color naranja en la que no entrábamos de pie. El señor que la conducía se llamaba Donato, creo recordar. Dentro llevaba cajas de fruta. Tengo grabada en la cabeza una escena en la que previamente habíamos estado precisamente aquí, en Daylight Studios, porque íbamos a hacer estudio y exteriores, y me hace muchísima gracia recordarla porque estábamos en plena Plaza de Atocha, ahí aparcados y, como teníamos que esperar a que se hiciera la foto, pues sacamos las cajas de fruta y ahí andábamos gran parte del equipo, tranquilamente sentados en la calle esperando.
En vez de esas sillas de rodaje que vemos ahora tanto.
Sí, sí, entonces no había nada de eso, ni sillas ni nada de nada. Total, que así es cómo empezamos. Esa fue la etapa en la que conocí a Freddy y a Daylight Studios en Embajadores.
¿Esa relación crece a partir de ese momento?
Sí, fue una relación que continuó y se fortaleció. Efectivamente, con el paso del tiempo todo mejoró, creo que también se debe a que hubo un avance de toda la sociedad e influyó en todo. Así que se empezaron a hacer muchas más cosas en estudio por muchas razones. Cuestiones de clima, por ejemplo; aunque haga bueno, no es tan fácil fotografiar siempre en la calle. En pleno verano hace un calor monstruoso y en pleno invierno pasas un frío horroroso. También quieres un entorno en el que la luz sea más fácil de manejar… En fin, muchas cosas, pero el caso es que pasaban los años y mi relación con Daylight Studios se fue manteniendo. Y además sucedió una cosa muy curiosa. Cosmopolitan se cambió de edificio, como toda la empresa, y de Colón nos mandaron a todos a Ciudad Lineal, justo en la zona en la que se había mudado recientemente Daylight Studios. Lo teníamos a huevo.
Se podría decir que Daylight Studios y Cosmopolitan estaban destinados a entenderse.
Sí, trabajábamos juntos casi. Pero, sobre todo, porque yo siempre trabajé muy cómoda aquí… Ya no recuerdo en qué momento se negoció una tarifa especial por el compromiso mutuo que existía. Prácticamente todo, salvo que el estudio no pudiera, se hacía aquí. Era muy cómodo porque teníamos muchas facilidades y es verdad que era un estudio que siempre estaba muy al día con todas las novedades y avances del sector. Siempre había un esfuerzo por darnos lo que pedíamos. Cuando haces muchas producciones en interior, no puedes hacerlas todas en fondo blanco. Entonces, bueno, hablábamos con los fotógrafos y estilistas y nos inventábamos historias, que en términos publicitarios seguro que se dice de una manera más fina, pero para decirlo en castellano y claramente lo que hacíamos era inventarnos nuestras historias. Mirábamos mucho las cosas que se estaban haciendo fuera y le pedíamos a Daylight Studios montones de cosas: decorados, todo tipo de fondos, pintar el ciclorama… Y, en general, siempre se hizo ajustándose a nuestras posibilidades el máximo posible. Yo trabajaba muy cómoda. Si tú empiezas a trabajar en un sitio, te tratan bien y estás a gusto, al final es un poco como estar en tu casa.
Y con tantas horas y tantas producciones después el trato se convierte en algo más personal, menos frío y profesional, ¿verdad? Hay una sensación de confianza entre ambas partes que crece.
Efectivamente, después de un tiempo la relación entre ambas partes sobrepasa lo estrictamente profesional. Yo soy una persona a la que le resulta muy difícil trabajar con fotógrafos, estilistas, maquilladoras, gente con la que trabajo habitualmente, sin implicarse emocionalmente y a un nivel personal. Es mi forma de ser. A veces trae problemas, lo reconozco, pero yo pienso que a mí, en general, me ha traído ventajas. Y con respecto a Daylight Studios, por supuesto que me sucedió lo mismo. Conecté desde el minuto uno muy bien con la gente. Además, yo tengo una vis un poco gamberra. Este trabajo es precioso, pero también es bastante estresante porque, y esto es verdad, hay muchos egos flotando en el aire con tanta gente implicada. Yo era la responsable de mantener una armonía, era técnicamente la jefa, me pagaba la revista por ello y tenía la última palabra, pero nunca fui una persona de “ordeno y mando”. Eso sirve poco para mí. Tienes que saber mantener un equilibrio. Y eso incluye el estudio. A veces tienes que cambiar una fecha. O un día, en apariencia sencillo, en el que has contratado el espacio media jornada porque sólo había que hacer cuatro fotos y de repente las cosas se complican y tienes que alargar la sesión pero te enteras que por la tarde el estudio ya lo tiene alguien contratado. Aquí, siempre se buscaba una buena solución. Entonces, como siempre he necesitado sentirme cómoda, arropada, aquí sentía que la gente estaba a gusto. Y eso lo llevaba a muchos terrenos. Que la comida sea decente y que no falte, que toda la gente que está en el estudio trabajando contigo sienta que son uno más del equipo porque lo son.
Vale, aquí tenemos que hablar sobre las famosas lentejas de tu madre…
Claro (risas). A ver, lo primero que tengo que decir es que mi madre se había dedicado al catering de manera profesional con otra señora y, además, en casa éramos nueve hermanos. Con eso te haces una idea de que ya sabía guisar para mucha gente. De ahí surgió todo. Cuando estás todo el día haciendo producciones, y no hablo de bodegones que ése es otro tema, hablo de trabajos con entre 8 y 12 personas implicadas durante 10 horas metidos en un estudio o en la calle, con una furgoneta dando vueltas por aquí y por allá, tienes que comer. Y yo siempre he sido de comer bien. También me gusta la comida rápida ¿eh? pero de tarde en tarde. Entonces, yo buscaba que se comiera bien, no cuatro sandwiches, y por ahí, no me acuerdo exactamente cómo, surgió como solución que mi madre podría ocuparse del catering. Para traernos la comida al estudio ella se adaptaba con platos reales, que es lo que yo pretendía. Para comer un sandwich y tal ya podías llamar a rodilla o a Mallorca, que no está mal, pero no puede todas las veces. Recuerdo que siempre nos traía postres y yo siempre me quejaba porque tampoco quería que la gente estuviera hasta arriba, pero no me hacía ni caso (risas)…
Pero seguro que la gente estaba encantada…
Hombre, sí, a la gente le encantaba. Es que además poco a poco también ella le fue cogiendo el tranquillo y no te hacía comidas superpesadas porque luego teníamos que seguir haciendo fotos. También tenía que haber también siempre opciones veganas para quien no comía carne. Pero vamos, básicamente era comida casera y estábamos todos encantados, yo la primera y creo que el resto de la gente también. De hecho, mucha gente cuando nos encontramos me recuerda “las comidas de Cosmo”.
Mencionabas cómo progresaron las cosas en el sector. ¿Cómo fueron esos momentos?
Fue bonito, porque pudimos avanzar mucho con el paso de los años. En editorial es verdad que los presupuestos no son altos, pero poco a poco fuimos avanzando, estirando el chicle, y la empresa iba tragando porque la revista se vendía, que esto es fundamental y entraba publicidad. Y todo había cambiado a nuestro alrededor en España. Todo era más profesional, de verdad. Pero también es cierto que al final todo tiene que ver mucho con la forma de ser de cada uno. A la hora de buscar una localización que no fuera un estudio lo normal es que no tuviéramos presupuesto. Si una agencia de publicidad quiere un pisazo, pues lo alquilaba y ya está. A nosotros no nos alcanzaba. Alguien que no conoces y que tiene un pisazo no te va a dejar que hagas fotos gratis porque tú lo vales. ¿Qué hacíamos? Buscarnos la vida. En aquella época yo recuerdo tirar de agenda, con mi familia, con conocidos, con amigos de no sé quién… Si necesitaba una bici, pues se la pedía mi primo, por decirte algo. Luego tratabas de compensar ese tipo de cesiones que te hacía gente desde mandando un ramo de flores o invitándoles a los desfiles. Era otro tipo de trato y eso era extrapolable a todo. Por ejemplo, con Daylight Studios, honestamente, creo que no he necesitado pedir demasiados favores, pero si se los he tenido que pedir me he sentido cómoda haciéndolo porque teníamos ese tipo de relación y la confianza y sabía que se lo podía pedir.
Y años más tarde, ya en 2010, termina tu relación con Cosmopolitan y abandonas ese mundo.
Sí, como todos sabemos fueron año difíciles y hubo muchos cambios. Al dejar de trabajar en editorial, mi vida cambió en poquísimo tiempo, radicalmente. Dejé de ser directora de moda de una revista pero había invertido en otro tipo de negocio, en restauración. Al principio, trabajé en este negocio pero pronto me puse a trabajar con un grupo de gente desarrollando una web de moda, aunque después de ponerla en marcha surgieron muchos problemas y en dos años dimos por finalizado el proyecto. En ese momento decidí que paraba y me iba a mi casa. Además, por una serie de razones vendí mi participación en el negocio de hostelería. Mi vida cambio totalmente en esos cuatro o cinco años, dejé de trabajar, aunque he hecho otras cosas esporádicas. Me han pedido colaboraciones, escribiendo, por ejemplo.
¿Y cómo ves ahora desde fuera el sector?
Voy a ser honesta. Mi vida cambio radicalmente y lo miro poco. Si te das cuenta, en estos diez años prácticamente las revistas de moda han desaparecido, quedan cabeceras internacionales más importantes, sobre todo, que supongo que están ahí porque tienen que estar. Imagino que también hay otra serie de razones como el tema publicitario, pero realmente no sé si la inversión publicitaria ahora les compensa o no. Ahora soy más seguidora de redes como Instagram, de tal y tal. Bueno, pues es como, ya sé que puede sonar prepotente por mi parte, pero es como que nada me sorprende. Me parece que ya está hecho antes. Sé que hay gente buenísima haciendo trabajos maravillosos pero muchas veces tengo la sensación que veo cosas que ya se habían hecho, no me sorprende casi nada, y de verdad que no quiero sonar prepotente.
Y, ahora, desde la calma y mirando atrás, ¿qué balance haces de tu larga trayectoria?
Estoy muy satisfecha con ella. A ver, como en muchos sitios hubo muchos buenos momentos pero también alguno difícil. Yo me he reído en este estudio hasta dolerme la mandíbula, hasta llorar de la risa, pero también te digo que en este negocio me ha tocado llorar por pasarlo mal. Recuerdo una de las últimas producciones, poco antes de dejar de trabajar, que se alargó como hasta 14 horas, un montón. Recuerdo una sensación de estrés, de agotamiento, de pensar que era un suplicio y desear que acabara ya y decirme a mí misma para tranquilizarme “mira, son fotos, no estamos operando a nadie a corazón abierto, son fotos”. Estaba agotaba y vivía una situación de bastante estrés porque estaba habiendo continuamente despidos. No estaba al cien por cien y recuerdo bien ese episodio pero recuerdo mucho más los buenos momentos. Yo, aquí, en estos estudios, he bailado y cantado, me lo he pasado genial trabajando. Y todo haciendo las cosas bien. Es más, creo que ese buen rollo se ha notado en el resultado final del trabajo.
¿Qué has sentido hoy al entrar de nuevo en Daylight Studios? ¿Qué has pensado al ver otra vez a Freddy o a Dani (Daniel Martín es el director técnico de Daylight Studios)?
Una sensación de alegría, claro, pero sobre todo como si no hubiera pasado el tiempo. Como si hubiera estado aquí ayer, y eso que calculo que habrán pasado unos diez años sin aparecer por aquí. Creo que eso también es un indicativo del tipo de relación que has tenido. Y luego, encima, está todo el equipo igual (risas). Me ha sorprendido lo poco que han cambiado.
Amazon Prime Video ha hecho públicos los carteles, con imágenes del fotógrafo Valero Rioja, de la segunda temporada de ‘Operación Marea Negra’, cuya primera entrega fue un éxito basado en un relato ficcionado sobre unos hechos reales de 2019 en el mundo del narcotráfico. Nuestros estudios participaron con transporte y equipo en la producción en la que se obtuvo el material gráfico para la campaña de promoción.
La producción y su organización corrieron a cargo de la agencia Mr.Pérez Management, con el mencionado Rioja detrás de la cámara asistido por Pedro Melo y Andrés Maiz.
La temporada 2 de ‘Operación Marea Negra’, cuya primera entrega fue una de las mejores series españolas de 2022, no contará con Álex González. Los nuevos episodios de la serie tendrán un nuevo protagonista, interpretado por el actor Jorge López (‘Élite’), y continuarán un hilo argumental centrado en el narcotráfico en las costas de Galicia
La sección de Cultura del periódico El Mundo, en sus versiones en papel y digital, ha publicado un reportaje documental titulado “Depresión, acoso y falta de intimidad: la cara oculta tras el brilli-brilli de los ‘influencers’”, redactado por la periodista Sara Polo e ilustrado con imágenes del fotógrafo Antonio Heredia. Nuestros estudios participaron aportando equipo: un kit Profoto B10 Plus 500W Air T TL Duo Kit más accesorios, para obtener las fotografías.
En el reportaje se refleja cómo llevan la fama destacados ‘influencers’ que han hecho de las redes sociales su forma de ganarse la vida y cuenta con declaraciones de Luc Loren, Lucía Bellido y Hamza Zaidi.
Nuestros estudios trabajan de forma constante desde hace una década con Unidad Editorial a través del alquiler de nuestros estudios, equipos o la asistencia de ‘staff’ para la realización de reportajes, entrevistas y otras actividades del grupo de referencia español de medios de comunicación.
Así, a lo largo de los años hemos colaborado en producciones con fotógrafos como el propio Heredia, Carlos García Pozo -jefe de fotografía de ElMundo-, José Ayma o Alberto Di Lolli, entre otros, protagonizadas por políticos, artistas, deportistas o figuras destacadas de nuestra sociedad.
Daylight Studios ha incorporado a su extenso catálogo de iluminación nuevos productos de la gama Clic de Profoto: el Clic Magnum, su modificador que concentra la luz aumentando la exposición hasta 1,8 f-stops y que incluye un grid para controlar la dispersión de la luz; y un nuevo Clic Softbox Octa de 80cm. con un nido Soft Grid. ¡Pregúntanos por ellos ya!
La gama Clic de la marca sueca es idónea para trabajar con los flashes de la serie A. Su montura magnética ofrece la forma más rápida de proyectar luz a largas distancias, y con la salida de luz efectiva adicional de 1,8EV, llegará más lejos sin que la luz natural le supere.
Al trabajar con la serie A de Profoto, el Clic Magnum es capaz de estrechar el ángulo del haz de luz de 62 a 37 grados y, en el caso de querer estrecharlo aún más, a 20 grados, basta con acoplar el grid correspondiente en el Clic Magnum.
Por otro lado, la nueva Clic Softbox Octa, en combinación con los flashes de la serie A de Profoto, genera una luz suave y favorecedora, ideal para retratos en primer plano, flat-lays y fotografías de bodegones o productos.
Es ideal para sesiones sobre la marcha en exteriores. Además de ser ligera y portátil, se puede plegar y desplegar rápidamente y cuenta con imanes para acoplarla sin problemas a la cabeza del flash. Todos estos factores se unen para que puedas empezar a disparar en solo un clic.
Además, cuenta con un asa y un adaptador para trípode. Además, gracias a su compatibilidad con otras herramientas de modelado de la luz Clic, puedes usarla de muchas maneras distintas.
El nido Softgrid se acopla creando una luz más dirigida y elimina una gran cantidad de luz dispersa, por lo que te permite modelar la luz incluso con más precisión.
Dos décadas y media después del inicio de su colaboración, Daylight Studios y Profoto mantienen una magnífica relación estudio/marca que se ha estrechado con un crecimiento mutuo, posicionándose ambas empresas como actores principales de sus respectivos sectores. Somos embajadores de la marca, que nos reconoce en su página web como uno de sus estudios colaboradores de referencia.
La cadena de supermercados alemanes Lidl ha lanzado una gama de dispositivos para el cuidado del cabello en colaboración con la cantante y actriz británica Rita Ora. Daylight Studios participó en la sesión de fotos para su campaña de promoción, realizada por la fotógrafa Quentin Jones en Nave María de Madrid, aportando equipo de iluminación y la presencia de nuestro técnico Mario Álvarez como segundo asistente.
Cepillos, planchas, secadores, rizadores… La nueva y amplia gama de productos para el cabello en la alianza de Lidl y Rita Ora aúna prestaciones con un precio contenido, como suele ser costumbre en la franquicia germana.
El lanzamiento de la campaña ha tenido lugar en la primera semana de febrero en los canales oficiales de Lidl, medios especializados y redes sociales con un video oficial y una serie de imágenes en las que la compositora y cantante posa con los distintos aparatos de la colaboración.
Aquí puedes ver el video que se rodó en la misma sesión en la que se obtuvieron las imágenes oficiales:
Un año más, nuestros estudios vuelven a colaborar en 2023 con Cruz Roja España (CRE) como empresa socia de la reconocida institución humanitaria, formando parte de un movimiento mundial que se sostiene con el compromiso regular de 17 millones de personas y entidades en 190 países. Este apoyo a su labor global, al igual que el que mantenemos con la mayor organización conservacionista independiente en el mundo, WWF (World Wildlife Fund), forma parte de nuestra estrategia de responsabilidad social corporativa.
Daylight Studios sigue comprometida socialmente con una aportación mensual para ayudar a los más vulnerables y participar en la construcción de un mundo más justo junto a Cruz Roja, que ofrece distintos tipos de colaboración a todo tipo de empresa debido a la gran diversidad de sus ámbitos de actuación. Así, el colectivo empresarial dispone de todas las vías posibles para que puedan desarrollar su acción social: aportaciones puntuales, compromiso a largo plazo, apoyo a un tipo de actividad afín a la empresa, cesión de espacios…
Además, para reconocer nuestro compromiso desde hace una década, al igual que el de todas sus empresas colaboradoras, Cruz Roja España nos permite unir su emblema junto al de nuestra empresa, para que quede vinculada a los valores de solidaridad y humanidad.
La Cruz Roja Española es una institución humanitaria que forma parte del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, cuyo fin principal es aliviar el dolor humano.
Actualmente centra su acción en cooperación internacional y la ayuda humanitaria, así como en la intervención social con colectivos vulnerables como personas mayores, refugiadas e inmigrantes, afectadas por VIH, drogodependientes, infancia y juventud, población reclusa, discapacitados, mujer en dificultad social, etc.
El suplemento ‘Fuera de Serie’, que se publica los sábados junto al diario económico ‘Expansión’, destinado a los amantes del lujo, ha contado con Carlos García Pozo, jefe de fotografía de El Mundo, para ilustrar su reportaje ‘Fiesta en Atrio y Casa Paredes: tres estrellas Michelin y el hotel más exclusivo’, redactado por la periodista Maribel González. Nuestros estudios participaron aportando equipo, un kit Profoto B10 Plus 500W Air T TL Duo Kit más accesorios, para obtener dichas imágenes.
Daylight Studios trabaja de forma habitual desde hace una década con Unidad Editorial a través del alquiler de sus estudios, equipos o la asistencia de ‘staff’ para la realización de reportajes, entrevistas y otras actividades del grupo de referencia español de medios de comunicación. Así, a lo largo de los años hemos colaborado en producciones con fotógrafos como el propio García, José Ayma o Alberto Di Lolli, entre otros, protagonizadas por políticos, artistas, deportistas o, como en este caso, lugares destacados.
El extenso reportaje incluye información sobre el reconocido restaurante Atrio de Toño Pérez y José Polo, que cuenta con tres estrellas Michelin, pero también sobre su nuevo y exclusivo hotel: Casa Palacio Paredes-Saavedra, recién estrenado y cuyas puertas se abrieron en exclusiva para Fuera de Serie.
Cada año, en Daylight Studios tienen lugar muchas producciones con todo tipo de vehículos como protagonistas. Desde nuestros inicios y durante más de tres décadas nos hemos esforzado para que nuestras instalaciones contarán con las condiciones perfectas para poder realizar estos trabajos con garantías de éxito, cuidando al máximo las necesidades específicas desde un punto de vista técnico y de seguridad. Hemos habilitado accesos especiales para vehículos a nuestros estudios, tenemos los mejores equipos y profesionales para fotografiarles y tras la renovación de nuestros Estudios 3 y 4 , ahora más que nunca, contamos con amplios espacios para que llevar a cabo este tipo de fotografía, muy común en campañas de publicidad, eventos y cursos, sea una experiencia totalmente satisfactoria.
A lo largo de nuestra larga trayectoria han pasado por nuestros estudios vehículos modelos de marcas tan lujosas y emblemáticas como Rolls Royce, Ferrari o Porsche, icónicos Minis, Cadillacs y Pontiacs, y muchos otros de marcas con un perfil más generalista como Opel, Nissan, Toyota,Peugeot o Mazda, entre otras. Recientemente, debido al auge de los vehículo eléctricos, hemos visto llegar a nuestros estudios coches como el Mini One Electric y diseños futuristas como el del Hyundai IONIQ.
Y es que hace ya dos años desde que decidiéramos ensanchar más aún nuestra entrada principal con el objetivo de hacer más rápido y sencillo el acceso de vehículos a nuestros Estudios 1 y 2. Al ser dos espacios adyacentes, los 180m² de superficie con Ciclorama de obra de nuestro Estudio 1 pueden ser ampliados en 90m² con nuestro Estudio 2, formando así una estancia completamente diáfana de 270m² para cualquier producción o presentación con vehículos que requiera uno o más modelos en exposición.
“Con la renovación que hicimos en 2020 con nuestros nuevos Estudios 3 y 4 las posibilidades de trabajar con vehículos de casi todos los tamaños se multiplicaron. Nuestro Estudio 3, con Ciclorama de obra y una altura de 3,5m. a 4,20m., alcanza los 230m² y es un gran espacio en el que poder realizar shootings y eventos con vehículos de todo tipo, con los 50m² del Estudio 4 como espacio complementario independiente además de cocina, azotea o un patio exterior cubierto de 70m² donde cargan, descargan y quedan aparcados habitualmente sin problemas muchos de los vehículos que forman nuestra flota”.
Pero eso no es todo. Con nuestros nuevos Estudios 3 y 4 ahora las posibilidades de trabajar con vehículos de casi todos los tamaños se multiplican. En este área, con solo cruzar la calle, disponemos de una nueva zona multifuncional con cocina, azotea o patio exterior cubierto de 70m², entre otros, donde cargan, descargan y quedan aparcados habitualmente sin problemas muchos de los vehículos que forman nuestra flota como las dos furgonetas, el microbús o el camión. Ahora, nuestro Estudio 3, con Ciclorama de obra y una altura de 3,5m. a 4,20m., alcanza los 230m², un gran espacio para poder realizar shootings y eventos con vehículos de todo tipo, con los 50m² del Estudio 4 como espacio complementario independiente.
Asimismo, tenemos los mejores profesionales y equipo para llevar a cabo con grandes resultados cualquier sesión que incluya la presencia de un vehículo. En algunas ocasiones se trata de trabajos complejos que requieren muchos conocimientos y un buen equipo de iluminación ya que, por ejemplo, la superficie de los coches refleja como un espejo todo lo que le rodea o si la producción con vehículo además incorpora uno o más modelos no es tarea sencilla conseguir una luz idónea para todos los participantes. Nuestro staff estará encantado de asistirte y resolver cualquier dudas que se presente.
Por último, a menudo, nuestros clientes nos preguntan cómo hacemos para acceder nuestros vehículos más grandes hasta nuestros estudios. El itinerario a seguir para no encontrar obstáculo alguno para acceder hasta las puertas de Daylight Studios se hace comenzando desde la calle Alcalá para, a continuación, girar (se puede en ambos sentidos) por la calle Hermanos de Pablo, hacerlo de nuevo en la calle Virgen de Lluc y en la calle Mandarina para finalmente coger Prudencio Alvaro hasta el número 41. Aquí tenéis una imagen del mapa con la ruta y el itinerario a seguir en Google Maps.
Nuestros estudios participaron en la realización de la campaña de Navidad de la marca de joyería Pandora, consistente en una colección de joyas para las fiestas con anillos, charms, collares y pulseras. Formamos parte de esta producción con transporte, equipo y la asistencia de un miembro de nuestro ‘staff’, Mario Álvarez.
Todos los años la casa danesa presenta una nueva colección con motivo de las fiestas navideñas. Como suele ser habitual, Pandora exhibe piezas inspiradas en la temporada de fiestas y conserva algunos de sus diseños más representativos, con modelos minimalistas, añadiendo también algunos modelos con un aire más vanguardista.
Nuestro nuevo Estudio 3 está ubicado en una zona multifuncional llena de posibilidades para llevar a cabo cualquier producción o evento. Dispone de un Ciclorama encastrado de obra de 7m. de largo x 5 m. de ancho. x 4,20m de alto, con de una altura mínima de de 3,5m. y máxima de 4,20m., abarcando un área de 230m². Se trata de un enorme espacio con luz natural y 19m. de tiro de cámara en el que realizar shootings y eventos
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